La salud y la enfermedad, así como la vida y la muerte, están intrínsecamente en manos de Dios.
En Tikun Shalom, reconocemos y respetamos profundamente la importancia de la atención médica profesional para tratar padecimientos físicos, mentales y emocionales. Sin embargo, también comprendemos que la curación verdadera va más allá de la intervención física. Es esencial abordar las raíces espirituales de la enfermedad para lograr una sanación completa y duradera.